domingo, 8 de enero de 2012

2012, etapa de alta montaña

acaba de finalizar el año 2011.
gran recuerdo de importantes cambios económicos, generales y particulares.

iniciado ya el periodo 2012, una simple pregunta me ronda la cabeza todos estos días,

¿cómo estaremos en las próximas navidades?

dado el vertiginoso ir y venir de los eventos, uno no tiene muy claro qué podrá ocurrir dentro de unos meses, ni siquiera, dentro de unos días.
Estos últimos años (y ya van demasiados, desde que en 2007 se le empezaran a ver las orejas al lobo) hemos aprendido que las cosas pueden cambiar, para bien o para mal, de un momento a otro, y debemos estar preparados, al menos mentalmente. Y debido a este 'intento' de preparación no cesan de fluir en la cabeza ideas y pensamientos, como atrapados en una caja, por no poder sacarlas. En ocasiones, esa caja parece que va a explotar, pero no ocurre durante demasiado tiempo, el ajetreo cotidiano te hace concentrarte en las cosas que esos momentos traes entre manos, y lo otro lo pospones hasta... no sabes cuando, normalmente por la noche, cuando te puedes tumbar mirando al techo, porque mirar al techo no requiere demasiado esfuerzo.

hace unos días escuche en un programa de radio (siempre digo cosas que he escuchado por la radio, porque escucho mucho la radio) decir que un estudio de no se quién determinó que desde que comenzó la crisis hemos aumentado  nuestro tiempo de ver la tele, por lo visto pasamos unas cuatro horas de media al dia viendo la tele, 'como hay mucho parado y no tienen nada que hacer...'. El locutor comentaba que si en lugar de estar cuatro horas viendo la tele, pasaramos cuatro horas al día leyendo libros sería muy diferente. Y creo que tien razón. Nos cuesta mucho hacer lo requiere esfuerzo, mental o físico. Y una de las cosas que me circulan continuamente por la cabeza es

¿habré hecho lo suficiente?

espero no tener que responder que 'si' a esa pregunta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario